Terroristas del submundo

Las imágenes del conflicto minero, cada día más recrudecido principalmente en Asturias, recorren el mundo. Los diarios internacionales publican en sus portadas fotografías de los enfrentamientos entre manifestantes y fuerzas del orden. Los medios nacionales le dedican poco o ningún espacio y muchas personas de diversos puntos de España aseguran que se mantienen informadas del asunto gracias a Twitter.

Gracias a Twitter, precisamente, se descubre lo que opinan estas fuerzas del Estado a través de un foro. ¿La definición del día? “Terrorista del submundo”. Ilustran esto con una instantánea de unos mineros lanzando cohetes caseros contra los GRS, ambos desperdigados por el verde monte astur, sin riesgo alguno para estos últimos, protegidos hasta las cejas con casco, escudo y chaleco. Al otro lado de lo que muchos califican “guerrilla”, los mineros, que lo único que protegen es su identidad, cubriéndose la cara, para evitar identificaciones y posibles detenciones.

En Foro Policía no les tiembla el pulso al escribir que “alguno está reviviendo el octubre de 1934” y en mostrar su “apoyo al GRS y que se cuiden muy mucho de esos cabestros incivilizados”.

Recapitulemos: octubre de 1934...

Wikipedia dice: La Revolución de 1934 o huelga general revolucionaria en España de 1934, fue un movimiento huelguístico revolucionario que se produjo entre los días 5 y 19 de octubre de 1934 durante el bienio radical-cedista de la II República. Este movimiento estuvo alentado desde amplios sectores y por importantes dirigentes del PSOE y la UGT, como Largo Caballero o Indalecio Prieto y de forma desigual por la Confederación Nacional del Trabajo (CNT), la Federación Anarquista Ibérica (FAI) y el Partido Comunista de España (PCE).

¿Diferencias? La revolución de junio de 2012 no tiene más colores que el negro. ¿Similitudes? Casi ocho décadas después la lucha obrera continúa, ante el peligro que corre la forma de vida de miles de personas, que contemplan cómo, impasibles, sus políticos no dudan en salvar primero a los bancos y las cajas de ahorro, mientras el barco se hunde lleno de civiles, sin presunción de inocencia alguna, “vivieron por encima sus posibilidades”. 

¿Son violentas las formas de protesta de los mineros? Desde luego no son pacíficas acampadas y gritos mudos a medianoche. Pero, ¿y las actuaciones de los GRS? Ayer por la tarde volvieron a entrar en la localidad leonesa de Ciñera de Gordón, en esta ocasión, accediendo al tramo de la N-630 que pasa frente al pueblo desde la montaña, teniendo una emboscada a los mineros que se encontraban cortando la carretera en esos momentos. Nuevamente, los habitantes de Ciñera se encontraban tranquilamente en la calle, observando a sus padres, hermanos, hijos protestando un día más por su pan de cada día. En esta ocasión, eran muchos menos y sí hubo intervención policial.

Más cristales rotos y otro herido por una pelota de goma. Y más que podría haberse tenido que lamentar. Para explicarlo, la siguiente foto: los tres círculos rojos muestran en qué lugar se encontraban los antidisturbios (más de 40, según datos de los propios ciñerenses). Disparando desde la montaña, el interior del pueblo y las calles que se encuentran al lado del colegio. En el patio de una de las casas que señala el círculo inferior han aparecido pelotas de goma que no llegaron a romper nada. Otros ciudadanos no tuvieron esa suerte y se han quedado sin los cristales de sus ventanas ante una actuación policial nuevamente excesiva. 

¿Quién paga los desperfectos de unos hogares a los que ya les cuesta llegar a fin de mes? ¿Quién es más terrorista? 

 (Fotografía de Aldara Asensio)